De las medias Platino a las Olimpiadas y el Macba.


Leopoldo Rodés ha sido un personaje polifacético y dotado de magnetismo, en la tradición de esos grandes burgueses catalanes del siglo XIX y el XX que supieron combinar la vocación por los negocios, la sensibilidad cultural y el disfrute de la buena vida. Muy joven se dio a conocer como uno de los modernizadores de la publicidad española en los años dorados de este negocio, los sesenta, cuando la calle Tuset se convirtió en el Madison Avenue Español y sus ejecutivos, en nuestros Don Draper y sus Mad Men “La publicidad ha sido mi vida”, confesaba Rodés no hace mucho. Licenciado en Derecho, la familia de su madre era propietaria de algunos cines y allí empezó a habituarse al mecanismo de los anuncios. Con su compañero de facultad José Carlos Iriarte decidió montar la agencia de publicidad Tiempo, que arrancó con llamativas campañas publicitarias como las de medias Platino, las camisas de Tergal o las radios Kolster.

Fuente: La Vanguardia.